Forro de superficie
total de este escenario con tablero liso ajustado y desmontable.
Las enrevesadas plantillas
las fabrico una a una para ajustar el
perímetro, esto ha sido lo más complicado, aunque también ha sido costoso el
movimiento de piezas, teniendo en cuenta la cantidad de metros y la dimensión
de los tableros.
El acabado en negro
mate al igual que estaban las paredes, los cortinajes y el techo, siendo el
resultado una cámara negra que delimita
el espacio de escena de las áreas de servicio del escenario que se entiende que
tienen que quedar escondidas a la vista del espectador.
Otro resultado
positivo ha sido la diferencia del suelo de origen, un parqué con mucho
colorido, brillante y resbaladizo al actual, homogéneo, fijo y estable.